Festividad de Nuestra Señora del Pilar del año 2004. Como
todos los años, un grupo de amigos palentinos, nos juntábamos esa noche, como
también lo hacíamos –hacemos- en la festividad de Santiago Apóstol, para celebrar
como Dios manda, y la tradición también, tales días. Pero aquel 12 de octubre
fue diferente, y es que hartos de ver la descomposición permanente de todo
aquello en lo que creemos, hartos del abandono y engaño al que están sometidas
las gentes de nuestra querida España, y con ellos sus símbolos y tradiciones, y
sobre todo más que hartos de sentirnos de alguna manera nostálgicos de épocas
pasadas, que ni siquiera habíamos podido conocer... Ese preciso día, festividad
de la Hispanidad, nos animó a dar un paso adelante y organizarnos como
asociación para realizar sin complejos todo aquello que
considerábamos justo y necesario.
Los primeros tiempos, todavía solo con el grupo original, y
con el nombre de Asociación Cultural Desperta Ferro, transcurrieron de forma
relativamente tranquila. Viajes culturales y patrióticos, cartas al director en
la prensa local reclamando y quejándonos de esto o aquello; celebraciones más
organizadas de festividades importantes, etc.. No era suficiente, y así en el
año 2008 fundamos la actual ACT Fernando III el Santo, con ánimo de hacer mucho
más, e intentar llegar a todos esos buenos españoles de nuestra tierra que
sufren en solitario la ruina de nuestra civilización, y que tanto tienen que
aportar cuando ofreces un lugar donde en sana camaradería, puedan defender la
trinchera de los justos y nobles
ideales.
Cuando fundamos la Asociación, marcamos cuatro pautas
básicas de comportamiento. En primer lugar, priorizar todos los actos de
nuestra Asociación a la defensa y divulgación de las tradiciones de España, así
como a la defensa de la concepción católica de nuestra Patria. Como segundo
punto, alejarnos como Asociación de cualquier ideal político; pues entendemos
que la defensa de los valores, no entiende de siglas, y sí de actos. En tercer
lugar, no pedir nunca ayuda o subvención de ningún tipo a las instituciones,
pues creemos que nos supondría a la larga, con toda seguridad, algún tipo de
vasallaje. Y por último, dedicarnos con especial énfasis a defender, divulgar y
honrar la figura nuestro Santo Patrón, el Rey de Castilla Don Fernando III el
Santo. Tan injustamente olvidado hoy en día.
¿Por qué el nombre de Fernando III el Santo? Porque nadie
como él refleja en la Historia de la civilización cristiana los valores en los
que creemos. San Fernando simboliza en la Historia de España al Rey justo; al
Rey sabio; al Rey cruzado; al buen esposo, buen padre y mejor hijo. Su legado
es inmenso: unió los reinos de Castilla y León de forma definitiva; reconquistó
territorios tan emblemáticos como Sevilla, Córdoba, Jaén o Murcia; tradujo el
fuero juzgo, dotando a sus territorios de una ley más justa; y estableció el
castellano como idioma oficial del Reino, dejando el latín para asuntos
eclesiales. Fue un Rey querido por igual por pueblo, clero y nobleza, y que
tuvo como prioridad no combatir frente a otros cristianos bajo ningún concepto.
Además de todo esto, era un hombre de una espiritualidad encomiable que le
acabó alzando a la santidad.
A todo esto, añadimos que San Fernando pasó gran parte de su
infancia y juventud en nuestra tierra palentina, y que aquí, en un pequeño
pueblecito llamado Autillo de Campos, lugar simbólico para nuestra Asociación,
fue proclamado Rey de Castilla un 14 de junio de 1217. Sin duda todo un
referente para esta nueva Reconquista a la que estamos obligados los que aún
sentimos la emoción de nuestra patria, fe y tradiciones en el corazón.
Ahora, con el proyecto Reconquista, vemos con ilusión como
esa idea que tuvimos aquel ya lejano 12 de octubre, también la han tenido otros
tantos camaradas en los diferentes rincones de nuestra vieja piel de toro. Y
que a buen seguro, esta unión, cada uno con sus ideales, pero todos firmes en
los principios esenciales, será la base desde la que pueda iniciarse la ansiada
segunda Reconquista.
Luis Carlón Sjovall
Presidente ACT Fernando III el Santo
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