Ideas fuerza

  • PATRIOTISMO INTEGRAL
España es una Nación histórica y milenaria que sienta su unidad y sus raíces desde largo tiempo en Europa. Nuestra herencia greco-romana, visigótica y católica forma parte de ese gran acervo del que somos parte cada uno de los españoles y que forman nuestra esencia nacional. 

Esto nos lleva a combatir cualquier idea que propugne la desmembración de esa unidad que con el sudor y la sangre de nuestros antepasados, nosotros debemos de hacer llegar a las generaciones venideras. Toda consigna de mutilación nacional es una traición. 

Parte de ese legado histórico hispánico son los diferentes pueblos que conforman la Nación. Somos conscientes de ello y participamos en el respeto y protección para todas aquellas lenguas españolas que, además del castellano como lengua oficial, forman parte de nuestra diversidad nacional y todas las distintas peculiaridades y tradiciones de las regiones de España. 

La Patria no es para nosotros algo estático sino dinámico; la misma ha de labrarse día a día y sin descanso. De poco nos vale la nostalgia y la consideramos proscrita en nuestro proyecto. Nuestra afirmación española recordará nuestros grandes hechos como pueblo, pero lo que urge es rescatar España y nuestra conciencia nacional y tradicional. 

  • SOBERANÍA NACIONAL 

El gran caballo de Troya del mundo actual para socavar la libertad de los pueblos y destruir los valores nacionales tiene un nombre: globalización, que no es un mero factor económico sino un entramado total: económico, político, social y cultural. La voracidad globalizadora y mundialista ha venido a convertirnos en masa amorfa y en esclavos de los intereses de los grandes grupos oligárquicos. 

En el caso específico español la Unión Europea ha anulado nuestra soberanía e independencia como Pueblo. Las castas políticas europeas al servicio de la usura (grandes magnates, multinacionales, entidades financieras, Club Bilderberg, FMI, Banco Mundial...) son las responsables principales de la hecatombe. 

Entre los ataques a la soberanía española se encuentran varios de diversa índole como es el trágala de la economía neoliberal capitalista para favorecer a las grandes corporaciones, el endeudamiento nacional y el pago de intereses abusivos, la destrucción de todo nuestro tejido industrial, la aniquilación de todas las conquistas sociales y un modelo cultural basado en una armonía utópica y delirante con la introducción de costumbres ajenas a nosotros y la imposición de flujos migratorios masivos que ponen en serio peligro nuestra homogeneidad como Pueblo. Esta defensa de nuestra soberanía tiene que tener como objetivo: la imposición de un modelo social justo para con nuestros compatriotas y la preservación de nuestra identidad frente al experimento multicultural. 

Igualmente, defendemos con ahínco la españolidad de nuestras plazas africanas de Ceuta y Melilla, ante los afanes anexionistas marroquíes, y la reivindicación de Gibraltar como territorio patrio de legítimo derecho frente a la ocupación británica, los cuales consideramos un atentado a la soberanía española y nos oponemos radicalmente a los procesos secesionistas abiertos en regiones como Cataluña y Vascongadas. Tanto los intentos disgregadores como la injerencia extranjera en nuestro pueblo son inadmisibles. 

Nosotros como españoles somos conscientes de la necesaria colaboración entre europeos. Desgraciadamente ante un mundo globalizado no podemos transmutar la situación en solitario. Por ello creemos que es insoslayable transformar la realidad europea actual radicalmente para hacer del viejo continente un sistema justo siempre y cuando nuestra soberanía no se vea quebrantada. 

  • JUSTICIA SOCIAL 

En el mundo globalizado las relaciones sociales, laborales y económicas son complejas pero, pese a ser conscientes de ello, es evidente que están fundadas en la injusticia. La situación catastrófica de desempleo, los problemas de desahucios de viviendas, la pérdida de conquistas sociales, la destrucción de pequeñas y medianas empresas (puntal básico de la economía de nuestro país) para la generación de empleo o la falta de una vida digna y decorosa de nuestros compatriotas son intolerables. 

La justicia social es para nosotros algo imprescindible por el sencillo hecho de que una idea nacional sin una profunda idea social está coja y disminuida. Queremos y exigimos al respecto un verdadero "Estado Socialmente Ético" que vele por el interés de la Nación y de su Pueblo. 

Apostamos por una economía social y nacional en contraposición al ideal del laissez-faire impuesto por el mundialismo. Es clara, por tanto, nuestra oposición al sistema capitalista actual que reduce al hombre a un simple número o estadística, que nos deshumaniza convirtiéndonos en máquinas de consumo y que reduce a la sociedad a la miseria material y espiritual, ya que el ser humano necesita cubrir sus necesidades básicas y además sentirse útil, valorado y pleno socialmente. 

Consideramos necesaria la creación de una banca pública que persiga el interés general de los españoles y el regreso a propiedad estatal de servicios públicos esenciales para la comunidad nacional tales como las telecomunicaciones, la energía y algunos transportes. 

Creemos que dentro de Europa hay que encontrar una fórmula de convivencia para nuestros intereses comunes. Esto nos lleva a día de hoy a poner en marcha la construcción de un modelo de "Autarquía Europea" para la protección de nuestra esfera comercial. Ello no supone que no puedan establecerse acuerdos comerciales adecuados a nuestras necesidades con otras naciones, en nuestro caso específico con los países hispanoamericanos. 

  • EDUCACIÓN Y CULTURA NACIONAL 

La educación en España ha sido un verdadero desastre desde hace décadas, nos ha reducido a la podredumbre europea y mundial en esta materia. Se encuentra totalmente desprestigiada por diversos factores como la falta de exigencia y de rigor, la pérdida de autoridad del profesorado y la conversión de la enseñanza a una arcadia feliz donde los valores del esfuerzo, dedicación y sacrifico han sido proscritos. La enseñanza se ha convertido en un sanedrín de la 

izquierda -con la anuencia de la derecha- que ha llevado al estudiantado a ser en muchos aspectos masa aborregada y manipulable a los intereses políticos y culturales de ciertos elementos. Asimismo la educación en España se ha convertido en la punta de lanza y arma básica de las ideas separatistas en algunas regiones para transformar a las futuras generaciones en el odio a España, lo cual está haciendo que este proceso sea difícil de revertir. 

Apostamos por una educación pública y nacional basada en los criterios de igualdad de oportunidades y de garantía de acceso de todos los españoles independientemente de sus medios económicos. Esto conlleva a la facilitación de becas a aquellos alumnos que con su trabajo y sacrificio lo merezcan y de aquellos estudiantes que por su valía carezcan de medios. Creemos en la meritocracia y la excelencia es una virtud que hay que premiar, por lo que desdeñamos el igualitarismo pastoso de aquellos que creen que el mérito es una discriminación, consideramos vital el inculcar el conocimiento de nuestra historia y nuestra cultura patria.
Creemos en la reivindicación de una educación que tenga un sentido espiritual y no materialista. En unos contenidos de la enseñanza que ayuden a entender y preservar la propia identidad nacional y cultural y que la misma promueva la investigación e incentive la iniciativa de los alumnos. 

  • NUEVO ESPÍRITU 

Creemos que la crisis espiritual de nuestro tiempo es la mayor de todas las que azotan al mundo actual. Una de las evidencias de la sociedad moderna es la profunda crisis ética y espiritual en la que nuestra sociedad va sumergiéndose de manera aparentemente irreversible. No es difícil estar de acuerdo en que sin la resolución de esta situación resultará muy improbable la resolución del resto de nuestros problemas sociales, económicos, culturales y políticos. Es por lo que esta crisis espiritual se convierte en un asunto de interés prioritario. 

Creemos firmemente en la idea de un "nuevo espíritu". El ser humano de la globalización vive en un perpetuo desaliento. La crisis de que hablamos puede describirse por sus efectos en dos niveles: en el nivel personal (depresiones, trastornos, inestabilidad familiar, drogadicción, alcoholismo…) y en el nivel social (las sectas, delincuencia, abortos, hembrismo, homosexualidad, corrupción…). 

"Valores" fomentados por determinados lobbys de poder -en realidad antivalores- deben ser fulminantemente erradicados, alentando las iniciativas sociales de carácter altruista y solidario, como la ayuda a compatriotas necesitados, la donación de sangre, la protección de los animales, de la naturaleza, del patrimonio histórico-artístico, etc. Ofrecer a la juventud nuevos contextos en los que pasar el tiempo libre, la vida en familia, las relaciones sociales y formar un carácter ético y moral.